Una cerca electrificada es un sistema de seguridad perimetral que se utiliza en hogares o negocios para disuadir la entrada de intrusos no deseados. Este sistema está compuesto por un conjunto de alambres o cables de aluminio y postes también de aluminio que cuentan con aisladores de poliuretano. Estos elementos son colocados sobre muros perimetrales o herrerías perimetrales con el fin de delimitar un área de seguridad.

El funcionamiento de la cerca electrificada se basa en la emisión de descargas eléctricas de impulsos de varios miles de voltios, de una duración en general más baja que 1 ms y una frecuencia de repetición de 1-2 Hz. Estas descargas eléctricas se emiten a través de los alambres o cables de la cerca y se activan cuando se detecta un intento de entrada a la zona protegida.

Entre los componentes de una cerca electrificada, se pueden mencionar: los alambres o cables de aluminio, postes también de aluminio, aisladores de poliuretano, energizadores, baterías de respaldo, sirenas y luces estroboscópicas.

En cuanto a los pros y contras de instalar una cerca electrificada, se pueden mencionar como beneficios su alta efectividad como sistema de seguridad, la posibilidad de personalizar el nivel de voltaje emitido, y su capacidad para disuadir a posibles intrusos. Entre los contras, se pueden mencionar el costo de instalación y mantenimiento, y el riesgo de lesiones para las personas y los animales si no se utiliza correctamente.